Salsa fresca de Tomate
Las salsas de tomate en tarros pueden ser altas en azúcares y sal añadidos. ¡Hacerla en casa significa que puedes controlar los ingredientes! Prueba hacer tandas grandes de esta salsa en verano y congela o pon en latas el exceo de modo que tengas una salsa fresca y casera a mano todo el año. Si no dispones de tomates frescos de buena calidad, sustituye aproximadamente por 24 oz. de tomates enlatados o italianos en cajas de buena calidad.
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- Prep time
- 10 min
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- Cook time
- 25 min
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- Servings
- 4 Servings
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- Serving size
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1/2 cup
Ingredients
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basil or parsley, or a combination (finamente picada)
- 2 tbsp
- 2 tbsp
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sea salt (sin refinar)
- 1/8 tsp
- 1/8 tsp
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black pepper (recién molido )
- 1/4 tsp
- 1/4 tsp
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olive oil (virgen extra )
- 2 tbsp
- 2 tbsp
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roma (plum) tomatoes (frescos, aproximadamente 2-2 1/2 lb)
- 10
- 10
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garlic (finamente picada)
- 3 clove
- 3 clove
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crushed red pepper flakes
- 1 pinch
- 1 ml
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Directions
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Pela los tomates surcando la piel de cada uno con un cuchillo afilado desde la punta aproximadamente 1/4 hacia abajo, en un patrón de "x". Luego coloca los tomates surcados en una olla llena de agua hirviendo y hierve hasta que sus pieles comiencen a romperse, aproximadamente por 2 minutos.
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Retira los tomates y zambúllelos dentro de agua fría. Cuando los tomates estén lo suficientemente fríos al tacto, pélalos. Si deseas una salsa con trozos, pica los tomates en cuadritos y resérvalos. Si quieres una salsa suave, pasa los tomates por un molino de comidas para crear un puré sin semillas.
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Calienta el aceite de oliva en una cacerola grande a fuego medio. Cuando esté caliente, añade el ajo y las hojuelas trituradas de chile rojo. Cocina justo hasta que el ajo comience a liberar su aroma.
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Añadir los tomates, sal, pimienta y albahaca o perejil. Revuelve bien para combinar, tapa y reduce el fuego a bajo. Cocina a fuego lento por 20 minutos.
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Sirve la salsa inmediatamente o permite que se enfríe a temperatura ambiente antes de almacenarla. Esta salsa se mantendrá en un recipiente hermético en el refrigerador por una semana, o en el congelador por un mes.