6 consejos para comer bien con diabetes durante las vacaciones by Caron Golden

¿Se va de vacaciones pero le preocupa mantener su plan de alimentación saludable en un entorno desconocido? Un poco de planificación por adelantado puede ayudarle mucho a disfrutar de sus vacaciones sin renunciar a unos hábitos alimentarios saludables que favorezcan el manejo de su diabetes.

• Lleve una nevera para guardar sus propios refrigerios en un viaje por carretera. Prepare una variedad de refrigerios, como fruta y verdura fresca cortada o congelada/descongelada, bolsas individuales de almendras o garbanzos tostados, o palomitas de maíz. Combínelos con alimentos ricos en proteínas, como vasos de yogur griego desnatado, huevos duros y queso en tiras bajo en grasa. A lo largo de sus viajes podrá encontrar tiendas de comestibles con productos saludables para rellenar la nevera.
• Si viaja en avión, traiga de casa refrigerios saludables y de larga duración, como frutos secos en porciones o una mezcla saludable de frutos secos que pueden ayudarle a mantener equilibrada la glucosa en sangre (azúcar en sangre). Si su vuelo incluye una comida, averigüe si puede pedir con antelación una comida apta para diabéticos. Visite el sitio web de su aeropuerto para conocer las opciones de comida en su terminal y compruebe sus menús y detalles nutricionales para venir preparado con un plan.
• Investigue los menús de los restaurantes antes de salir a cenar. Muchos restaurantes disponen ahora de menús en Internet y ofrecen información sobre los ingredientes y los datos nutricionales de sus productos. Cuando llegue al restaurante con una estrategia, se sentirá más preparado y confiado a la hora de tomar decisiones que se ajusten a los objetivos de su plan de alimentación.
• Por otra parte, si se encuentra en un restaurante donde las opciones no se ajustan a su plan de alimentación, pida el plato más sano disponible, coma raciones más pequeñas y comparta el resto. Busque palabras clave en los menús como "asado", "al horno" y "a la parrilla" y elija comidas equilibradas que ofrezcan una fuente de proteínas magras, verduras sin almidón y una pequeña porción de almidón para mantenerse satisfecho y seguir su plan de alimentación. Reduzca el alcohol al mínimo, ya que suele contener azúcares añadidos y calorías.
• Elija los mejores carbohidratos que pueda. Priorice la elección de carbohidratos mínimamente procesados y ricos en nutrientes y céntrese en consumir porciones pequeñas. Equilibre sus comidas y refrigerios incluyendo frutas y verduras y proteínas magras siempre que pueda. No tema pedir ayuda a su camarero o que le modifique un plato. Por ejemplo, pida que le sirvan el sándwich de pollo en un bollo integral en lugar de pan blanco, y cambie las patatas fritas por verduras a la plancha o una ensalada con aliño ligero.
• Lea las etiquetas nutricionales, sobre todo las de los aperitivos y bebidas envasados. El agua es su mejor opción para beber y mantenerse hidratado, especialmente si está expuesto al sol o realiza mucha actividad física. También puede optar por bebidas sin calorías o agua con frutas. Limite las bebidas azucaradas o alcohólicas. Pase por un mercado local y compre algunos refrigerios saludables para llevar consigo y saborear durante el día. Esto le ayudará a mantenerse lleno y satisfecho.
• Investigue los alimentos regionales de lugares en los que nunca ha estado, ya sean nacionales o extranjeros. Aproveche los foros de viajes en línea para obtener consejos sobre restaurantes, especialmente si visita países cuyo idioma desconoce. Saber a qué atenerse y conocer los nombres de los restaurantes y platos más ricos en verduras y proteínas puede ayudarle a planificar sus opciones y a probar nuevos alimentos que se ajusten a sus necesidades dietéticas.